Aprendimos Internet impulsivamente...
Internet no es un medio que invite a la reflexión. Aprendimos a usarlo precipitadamente, porque un día apareció, y nos pareció bueno, y parecía fácil.
Hoy ya no es uno de los métodos que usamos para informarnos. Es el método. Pero seguimos usándolo como el primer día: a impulsos, precipitadamente.

Nadie nos ha enseñado a usar este medio. Surgió un día, con herramientas que sencillamente parecían ponernos al alcance de nuestros dedos todos los datos que necesitábamos. Pero datos no significa información, e información no significa conocimiento.
Falta reflexión. Pero en Internet nadie reflexiona. Usar y tirar, como nuestro mundo de hoy.
Si reflexionamos salen detalles asombrosos. La semana pasada, el Informe Pisa alertaba porque en España estamos educando a una generación que no comprende lo que lee. Precisamente el principal medio de comunicación de Internet: la lectura. Algunos tertulianos de radio avisaban de que parte de la culpa la tenía Internet: recibir toneladas de información a base de pocos clics estaba eliminando la cultura del esfuerzo. Mentira. Antes a pocos pasos tenías libros donde estaba mucho de lo que necesitabas. Más daño ha hecho un avance tecnológico menos reconocido pero igualmente revolucionario: cortar y pegar. Internet, seleccionar, cortar y pegar sí ha eliminado el esfuerzo. Si invita a no reflexionar.
Nadie enseña en las escuelas a usar esa herramienta. Quizás porque ni los propios profesores saben como agarrarla. O porque no estén motivados a reciclarse. Pero no te vayas a la ESO. ¿Quién te enseñó a ti a usar Internet? ¿Usas la Red para tus necesidades, o eres tú el que se amolda a ella? ¿Te has planteado qué es lo que realmente vas a encontrar allí? ¿Sabes buscar en Internet? ¿Has reflexionado sobre lo que de verdad te da Internet? ¿O es que te da igual la calidad, mientras dos clics te den rapidez y cantidad?
En la era del automóvil los conductores hemos pasado por la autoescuela. En la "era de la información" usamos sus herramientas atropelladamente, poniendo toda nuestra confianza en las máquinas. "Dame un resultado", gritamos. No nos paramos a reflexionar. ¿Lo estaremos haciendo bien? Llegar a una conclusión lleva tiempo. Incluso estar desconectados del mundo para encontrarnos con nosotros mismos, por ejemplo con un texto en papel, uno solo, y sin cables. Justo lo contrario a lo que nos impulsa Internet.
Aprendemos impulsivamente, a golpes. Y a menudo lo haremos mal. Nos colarán lo primero que se inventen. Como el primer resultado de un búsqueda en Google. No puede ser esta la sociedad de la información cuando ni los estudiantes de 15 años parecen leer bien.
Etiquetas: explorar informacion, gestión de información, google humano, reflexiones
1 comentarios:
Hola Miguel ángel, soy bibliotecaria y he leído alguna entradita tuya y me gusta lo que dices porque en lo que atañe a libros, búsqueda de información (no todo esta gugle)en las bibliotecas muy bien dicho, y lo de aprender impulsivamente y compulsivamente va en uno, que me dirías frente a preguntas de mis usuarios al respecto ¿el internet de la biblioteca es para Burgos o para Castilla y León? y tengo internet en casa pero no google, AAYYYY.... y es gente que han estado en internet o a recibido algún curso, y es que definitivamente internet se aprende usándolo. ;P hasta pronto.
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio