Búsquedas concretas y cruzadas
Muchas veces nos complicamos la vida innecesariamente, o buscamos complejidad donde no la hay. También pasa cuando exploramos información. Si necesitamos algo lo mejor que podemos hacer es … buscarlo.
Nuestra vida será mucho más fácil si somos concretos. ¿Qué necesitamos “proveedores de agua embotellada que distribuyan por la provincia de Pontevedra”, pues buscaremos “proveedores de agua embotellada que distribuyan por la provincia de Pontevedra”? No buscaremos “agua”, ni “Pontevedra” ni “proveedores”.
Parece una chorrada, pero no lo es. Si analizáis vuestras necesidades informativas veréis que muchas veces hacéis búsquedas demasiado genéricas y luego perdéis muchísimo tiempo discriminando el trigo de la paja. En cambio, hay muchos medios donde, si preguntas lo que quieres, obtienes lo querealmente necesitas: buscadores de Internet, directorios y bases de datos, OPACs, y, sobre todo, personas.
Os cuento el caso concreto que me pasó ayer con mi becario. Estábamos haciendo un estudio del mercado audiovisual para presentar mi consultora Histania a potenciales nuevos clientes. La lista de empresas original la obtuve de una base de datos muy potente y de pago, aunque hay maneras (lícitas, ojo) de conseguir gratis esa información. Hicimos por teléfono una entrevista a una directora de producción de Barcelona, que amablemente (tuvimos suerte) nos pasó mucha información útil sobre las necesidades y características de su empresa. Acto seguido fuimos a Google, hicimos una búsqueda con el nombre y apellidos de dicha directora más el nombre de su empresa, y ¡oh! sorpresa, su nombre apareció en un mensaje de una lista de correo asociado a un listado de productoras catalanas junto con teléfonos y, lo más importante, personas de contacto. Un material impagable para hacer una investigación de mercado mucho más atinada.
Este caso implicó una combinación de técnicas y documentos:
- Una base de datos de calidad
- Una entrevista a una persona
- Una búsqueda concreta y cruzada con un buscador
Los resultados fueron, como habéis visto, espectaculares: una lista de empresas con sus datos económicos, teléfonos y personas de contacto de un sector al que me interesa dirigirme, más el caso específico de una empresa que me contó detalles inaccesibles por vía papel o Internet.
Sin embargo, no hubiese conseguido una productividad tan alta sin haber hecho una búsqueda concreta y cruzada con Google. En mi post anterior daba 15 razones por las que Google (y por ende cualquier otro buscador de Internet) era tonto, pero ahora va uno de sus puntos fuertes: es un crack buscando palabras sueltas. Aprovéchalo para incluir en su cajita blanca todas las palabras que se te ocurran relacionadas con la información final que te interesa (o frases completas “entre comillas”), pero incluye además palabras específicas que sean respuestas válidas a tus objetivos de búsqueda (y nada hay más específico que un nombre propio, como el de una persona o una empresa). A eso le llamo “búsquedas cruzadas” porque cruzan tu necesidad original con un resultado válido. De un cruce sale una “X”, que como todos sabemos marca el lugar del tesoro: documentos concretos con información precisa que soluciona tus necesidades informativas. O sea, justo lo que queremos.
Etiquetas: explorar informacion, google humano, reflexiones, técnicas, trucos
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio